Potabilización de agua de río: cuáles son las tecnologías que se utilizan
La Organización de las Naciones Unidas establece que el acceso a agua segura es un derecho humano universal; sin embargo, en la actualidad 2200 millones de personas carecen de este recurso. La potabilización de agua de río es un paso clave para hacer frente a este desafío.
Poner en marcha iniciativas apuntadas a depurar las aguas superficiales permite ampliar la disponibilidad del recurso hídrico y contribuye a lograr un acceso universal y equitativo al agua potable a un precio asequible para todos, tal como lo determina Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) número 6 de la ONU.
Ahora bien, ¿qué tecnologías se utilizan para llevar adelante la potabilización de las aguas de los ríos? Te lo contamos en esta nota.
A qué llamamos potabilización del recurso hídrico
El agua es un elemento vital para el desarrollo de las personas. Por eso, además de cuidar el recurso para evitar la escasez, es imprescindible que el agua que consume y utiliza la población para sus tareas cotidianas sea segura y no represente ningún tipo de riesgo a nivel sanitario.
Para que esto ocurra, es necesario eliminar las sustancias nocivas (zinc, plomo, cromo, entre otras), así como los materiales orgánicos y biológicos (algas, arena, virus y bacterias) que pueden estar presentes en el agua, ya que representan un potencial peligro para la salud de los seres humanos.
La potabilización es el proceso a través del cual el agua cruda —es decir, aquella que no ha recibido ningún tratamiento ni ha sido introducida en la red distribución— se convierte en agua apta para el consumo humano, de acuerdo con lo que determina el organismo sanitario regulador.
Por ejemplo, en nuestro país, los criterios que establecen cuándo el agua es potable y puede ser consumida por las personas sin representar un riesgo, se encuentran en el Código Alimentario Argentino.
Cuáles son las tecnologías que se utilizan en la potabilización de agua de río
Como mencionamos, para que el agua cruda se convierta en potable, es necesario depurarla. Esto se logra a través de un proceso que se realiza en las estaciones de tratamiento de aguas, también llamadas plantas potabilizadoras.
El proceso se divide en etapas o barreras sucesivas, e implica la utilización de diversas tecnologías y herramientas que ayudan a eliminar todos los elementos nocivos para las personas.
Pretratamiento
El agua del río es recolectada a través de torres de toma localizadas sobre los márgenes de los cuerpos de agua.
Una vez captada, se inicia la fase de pretratamiento que tiene como objetivo eliminar los sólidos de gran tamaño y proteger la entrada de peces que, eventualmente, pueden haber sido absorbidos por el sistema.
En esta etapa se utilizan rejas gruesas (con separaciones de 15 milímetros o superiores) para retener residuos voluminosos como piedras, chatarra, papel, ramas, raíces, trapos y plásticos. También se emplean tamices con aberturas más estrechas a fin de evitar el pasaje de residuos finos.
Asimismo, durante el pretratamiento se usan desarenadores para separar arena, cenizas y grava que, si permanecen en el agua, pueden dañar las bombas de la planta potabilizadora.
Coagulación y floculación
A continuación, el agua es transportada por bombas de baja presión hacia cámaras de mezcla. Allí se ajusta el pH a través de la adición de bases o ácidos y se incorporan agentes coagulantes y floculantes, componentes que hacen posible la potabilización.
La dosificación del coagulante se determina a partir de ensayos previos en laboratorio. La arcilla, los microorganismos y los ácidos orgánicos que se encuentran suspendidos en el agua del río poseen carga negativa. Al adicionar un coagulante con carga positiva, los coloides de carga negativa se desestabilizan y se aglomeran en coágulos, también conocidos como flóculos o flocs.
El proceso de floculación tiene como propósito favorecer el choque de los flocs. Para lograrlo, los bastidores de paletas de las cámaras de floculación (que se encuentran en la entrada de los decantadores) producen una agitación suave.
Decantación
En esta fase, que comienza cuando termina la coagulación, se busca separar las partículas en suspensión que transporta el agua utilizando la gravedad.
Los elementos más densos permanecen en el fondo, donde son eliminados. Vale aclarar que en esta etapa la velocidad de circulación del agua tratada debe reducirse al máximo a fin de facilitar al asentamiento los flocs.
Existen diversas tecnologías para esta etapa que permiten tratar aguas de diferentes características.
Filtración
Luego de decantar el agua, se la hace pasar por un medio poroso con el objetivo de eliminar los sedimentos menos densos que aún permanecen en suspensión.
En esta fase, se utilizan filtros de arena (lechos de grava y arena que retienen las partículas suspendidas en el agua) o filtros de carbón activado (lechos de esta sustancia que eliminan diversos contaminantes, como compuestos clorados, sustancias que producen olores y materiales orgánicos).
Desinfección
El objetivo de esta etapa es inactivar cualquier tipo de bacteria que pudiera haber quedado activa en este punto del proceso.
Para lograr este propósito, se añaden diferentes agentes desinfectantes, como ácidos clorogénicos, rayos UV u ozono.
Análisis
Una vez que concluyen todas las etapas anteriores, es necesario analizar el agua resultante para asegurarse de que el proceso potabilizador fue exitoso.
Además de ser insípida, incolora e inodora, el agua debe cumplir con la reglamentación vigente de cada país a fin de ser considerada apta para consumo humano y poder ser incluida en la red de distribución.
En Ecopreneur, contamos con diferentes sistemas de tratamiento de aguas que pueden ser utilizados en plantas potabilizadoras, como decantación laminar o de placas, electrodesionización (EDI), filtración convencional/multimedia, filtros de carbón activado, intercambio iónico, lecho mixto, microfiltración, ósmosis inversa y ultrafiltración, entre otros.
Actualmente, contamos con 3 plantas potabilizadoras localizadas en Concepción del Uruguay, localizada en la provincia de Entre Ríos, y Nordelta y Villanueva, ambas ubicadas en la provincia de Buenos Aires, así como otras en ejecución.
Si necesitás más información sobre las tecnologías utilizadas en el proceso de potabilización de agua de río, contactanos.