Versátil, eficiente y económica, la ultrafiltración (UF) es uno de los procesos de separación por membrana más utilizados; tanto en el tratamiento de aguas residuales, como etapa previa a la ósmosis inversa - nanofiltración.
Esta técnica, que separa mecánicamente los sólidos suspendidos o disueltos valiéndose de la presión hidrostática, tiene la capacidad de eliminar una amplia gama de contaminantes, desde partículas y microorganismos hasta aceites y grasas.
En este artículo, exploramos las características, el funcionamiento y las ventajas de esta tecnología y detallamos cuáles son sus aplicaciones
Es un proceso de purificación del agua que utiliza presión hidrostática para forzar el agua a través de una membrana semipermeable que posee poros muy finos.
Estos actúan como una barrera física, ya que, si bien permiten el paso del agua y moléculas pequeñas, retienen partículas más grandes, como bacterias, virus, sólidos en suspensión, proteínas, aceites, grasas y coloides.
Los sólidos suspendidos y los solutos de alto peso molecular permanecen en el lado del retentato de la membrana, mientras que el agua y los solutos de bajo peso molecular se filtran y pasan a través de la membrana, posicionándose del lado de la infiltración.
Vale aclarar que el tamaño de los poros de las membranas de ultrafiltración oscila entre 0.1 y 0.01 micrones, lo que hace que el rango de filtración de la UF se posicione entre la microfiltración y la nanofiltración.
Las membranas utilizadas en la ultrafiltración requieren la limpieza y mantenimiento periódicos, a fin de eliminar la suciedad producida por sólidos y evitar la descamación y la presencia de agentes microbiológicos, como microbios y algas.
¿Cuáles son las ventajas de su aplicación?
La UF ofrece una serie de beneficios sobre otros procesos, entre los que destacan:
La UF se utiliza fundamentalmente como pretratamiento para aguas superficiales, agua de mar, aguas subterráneas, efluentes sometidos a tratamientos biológicos, así como para pretratar el agua que luego será sometida a procesos de nanofiltración u ósmosis inversa.
También se utiliza para tratar aguas residuales industriales y en los procesos de ablandamiento de agua.
En síntesis, se trata de una tecnología poderosa y versátil que tiene la capacidad de eliminar una amplia gama de contaminantes, es eficiente y admite instalaciones de tamaño compacto, características que la convierten en una solución ideal para diversas aplicaciones.
Al elegir un sistema de ultrafiltración, es fundamental trabajar con un partner experimentado que pueda diseñar e implementar un sistema que satisfaga tus necesidades específicas. Si necesitás saber más sobre esta técnica, contactanos.